1.e4 e6 2.d4 d5 3.Nc3 Nf6 4.Bg5 De nuevo la variante clásica en la defensa francesa; la vimos anteriormente en la partida Kaplan-Bronstein de mayo de 2014.
4...Be7 En lugar de 4...dxe4, jugada por Bronstein, Spielmann prefiere la considerada tradicionalmente como línea principal en esta variante.
5.e5 Nfd7 6.h4 Este interesante sacrificio, concebido por Adolf Albin y ensayado inicialmente por Chatard, no se tomó en serio hasta la famosa partida Alekhine–Fahrni, Mannheim 1914, por lo que hoy se le describe indistintamente como "ataque Albin–Chatard" o ataque "Alekhine–Chatard". La continuación normal es 6.Bxe7 Qxe7 7.f4, recomendada por Steinitz.
6...Bxg5 Con el avance de su peón de torre las blancas complican muchísimo el enroque negro: si 6...O-O, podría prepararse un sacrificio potencialmente devastador en h7 con jugadas como Bf1-d3 y Ng1-h3, y en caso de 6...h6 el blanco puede evitar el cambio de alfiles con 7.Be3, con la vista puesta en el peón de h6 y la intención de crear nuevas debilidades en el ala de rey. Por último, si, como en la partida, las negras aceptan el peón, el enroque sería directamente un suicido. Un peón es un peón, pero a cambio las blancas desarrollan rápidamente sus piezas y consiguen una significativa ventaja espacial. Una alternativa sensata para las negras es olvidarse de momento del flanco este y contraatacar en el centro con 6...c5 (a veces se juega antes 6...a6 para evitar que el caballo salte a b5).
7.hxg5 Qxg5 8.Nh3! La maniobra estándar del blanco en esta posición consiste en llevar el caballo a f4 y la dama a g4. Tras la simple 8.Nf3 Qe7 9.Bd3 a6 10.Qe2 c5 11.O-O-O Nc6 el negro no tiene especiales problemas.
8...Qe7 Si 8...Qh6?! la dama quedaría fuera de juego con 9.Nb5 Na6 10.f4.
9.Qg4 La partida Alekhine-Fahrni prosiguió 9.Nf4 Nf8?! (es mejor 9...g6) 10.Qg4! (con la doble amenaza de 11.Qxg7 y 11.Nxd5) 10...f5 11.exf6 gxf6 12.O-O-O c6 13.Re1 Kd8 14.Rh6! e5 15.Qh4 Nbd7 16.Bd3 (también era muy fuerte 16.Ncxd5!) 16...e4 17.Qg3 Qf7 (si 17.Qd6 vendría igualmente 18.Bxe4! dxe4 19.Rxe4 y la dama irrumpirá en g7 con efectos decisivos) 18.Bxe4! dxe4 19.Nxe4 Rg8 (o bien 19...Qxa2 20.Nxf6! Nxf6 21.Qg7!) 20.Qa3! (cambio de escenario; las negras están acabadas) 20...Qg7 21.Nd6 Nb6 22.Ne8! Qf7 23.Qd6+ y las negras abandonaron ante 23...Qd7 24.Qxf6+ Qe7 25.Qxe7#.
9...g6 10.Nf4 En adelante las negras tendrán que estar muy pendientes de un eventual sacrificio en d5.
10...a6!? Bien fundamentada desde el punto de vista posicional, pero un poco lenta. La alternativa es 10...Nc6.
11.O-O-O Aquí Keres recomendaba 11.Qg3, porque si 11...c5? las blancas consiguen una gran ventaja con el mencionado sacrificio: 12.Ncxd5! exd5 13.Nxd5 Qd8 14.e6!.
11...c5 12.Qg3 Con la consabida amenaza 13.Ncxd5 exd5 14.Nxd5 Qd8 15.e6.
Notemos que la directa 12.Ncxd5? es prematura, 12...exd5 13.Nxd5 Nb6!.
12...Nb6 12...cxd4!? es digna de consideración, ya que el ordenador se defiende bien tras 13.Ncxd5 exd5 14.Nxd5 Qc5. Sin embargo, luego de 13.Rxd4 Nc6 14.Rd2 hay que andarse con pies de plomo. Si, por ejemplo, 14...Ndxe5? (14...d4 15.Ne4 Ndxe5 16.c3 es mejor, aunque las blancas tienen compensación por el déficit material), entonces una vez más 15.Nfxd5! exd5 16.Nxd5 Qd8 17.Qf4 f5 18.Qe3 Qa5 19.Bc4 y las negras están al borde del abismo.
13.dxc5 Qxc5 14.Bd3 Con la tremenda 15.Bxg6! fxg6 16.Nxg6 Rg8 17.Rxh7 en la recámara.
14...Qf8? El error clave, aunque eso es muy fácil decirlo desde el sillón. Es verdad que así se previene 15.Bxg6? hxg6, pero Spielmann pasa un sutilísimo detalle por alto.
Lo correcto era 14...Qc7, que además de defender 15.Bxg6? fxg6 16.Nxg6? Rg8 amenaza el peón de e5, imposibilitando la fantástica idea que Bogoljubov mostrará a continuación. Debe decirse, no obstante, que tras la simple 15.Nh3, con la intención de Ng5, las blancas tienen una partida muy cómoda.
15.Be4!! Una de las jugadas más bonitas que veréis en años.
15...dxe4 Las negras no tienen opción. Si por ejemplo 15...Nc6 las blancas percuten como siempre en d5, 16.Bxd5! Nxd5 17.Nfxd5 exd5 18.Nxd5, y ganan en todas las variantes, por ejemplo 18...Kd8 (o 18...Rb8 19.Nc7+ Ke7 20.Qa3+ y mate a la siguiente) 19.Nf6+ Kc7 (19...Ke7 20.Qa3+ también lleva al mate) 20.e6+ Kb6 21.e7.
16.Nxe4 El doble agujero en d6 y f6 vale su peso en oro.
16...N8d7 17.Qc3! Otro soberbio golpe de Bogoljugov. La mera posibilidad de que dama se instale en c7 ya produce desasosiego, pero la verdadera amenaza es 18.Qd4!, para seguir con 19.Nf6+, y si 19...Ke7 entonces 20.Qd6+, mientras que si 19...Kd8 entonces 20.Qxb6+.
17...Qe7?! Otra manera de intentar resolver los problemas es 17...a5, para contestar a 18.Qd4 con 18...Qb4, pero las blancas tienen 18.Rd6! Qe7 19.Qc7! y podría seguir un desastre tipo 19...Kf8 20.Rhd1 Nd5 21.Nxd5 exd5 22.R1xd5 Qh4 23.e6 fxe6 24.Rxd7 Bxd7 25.Rxd7.
Lo menos malo, relativamente hablando, es 17...h5! 18.Nd6+ Ke7 19.Qb4 Kd8 20.Qa5 Kc7 21.Nc4 Kb8 22.Nxb6 Nxb6 23.Qxb6. Aunque el equilibrio material se ha restablecido y las blancas dominan el tablero, la máquina no encuentra nada inmediatamente decisivo.
18.Nf6+ Punto de no retorno. Las blancas ganan.
18...Nxf6 Si 18...Kd8 entonces 19.Qa5 Kc7 20.N4d5+! exd5 21.Nxd5+,
y si 18...Kf8 entonces 19.Nxh7+ Kg7 20.Nh5+! gxh5 (20...Kxh7 21.Nf6+ Kg7 22.Rxh8 Kxh8 23.Qh3+) 21.Qg3+ Kh6 22.Rxh5+ Kxh5 23.Rh1+.
19.exf6 Qf8 No hay desahogo por ningún sitio, véase 19...Na4 20.Qd4 Qd7 21.Qe5 Qc6 22.Nxg6! fxg6 23.f7+.
20.Qc7 Se confirman los peores temores del negro. La dama amenaza capturar en b6 y dar mate en d8.
20...Nd7 21.Nd5! Sigue la fiesta. Lo próximo, si no remedia Spielmann, es 22.Nb6.
21...exd5 La alternativa 21...Qc5 permite el coqueto remate 22.Qxc5 Nxc5 23.Nc7+ Kf8 24.Rd8#.
22.Rhe1+ Ne5 23.Rxe5+ Be6 La situación parece haberse sosegado un tanto, y las negras están aún una pieza por delante, pero es hora de una nueva exquisitez:
24.Kb1! Si 24.Rdxd5? Qh6+ 25.Kd1 la partida daría un vuelco con 25...O-O!: ¡las negras aún tienen derecho a enrocarse!
24...Rd8 Las negras se salvarían con 24...Qb4, y enroque en la siguiente jugada, de no ser por 25.a3!, que obliga a la dama a regresar a f8.
25.Rdxd5! A pesar de todo.
25...Rxd5 26.Rxd5 Bxd5 27.Qc8# Lo que hizo Bogoljubov en esta partida desde la jugada 15 en adelante está al alcance de muy, muy pocos.
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[Comentarios parcialmente basados en notas de Gufeld y Stetsko]