Marco - Maróczy

Viena 1899


1.e4 e6 2.d4 d5 3.exd5 En la partida entre el fantasma de Maróczy y Korchnoi también se jugó, curiosamente, la defensa francesa, aunque en aquella ocasión el ectoplasma se decantó por la más ambiciosa variante Winawer 3.Nc3 Bb4. 3...exd5 La variante del cambio ha tenido desde siempre reputación de "pacífica" y ha servido como excusa para muchas "tablas de grandes maestros", aunque esto no tiene por qué ser así. De hecho, la experiencia ha demostrado que si las blancas se conforman con el empate la mejor política es jugar activamente, porque en los esquemas simétricos el negro tiene muchas veces la opción de ser el primero en desequilibrar la posición. 4.Nf3 Bd6 5.Bd3 Nf6 Maróczy sigue de momento la corriente a Marco. Si el negro está peleón puede optar por cosas como 5...Ne7 6.Nc3 c6 7.O-O Bg4 8.Re1 Qb6 9.Bd2 Nd7 10.Na4 Qc7 con juego complejo (Bannik-Korchnoi, Campeonato de la URSS, Leningrado 1956). 6.O-O O-O 7.c3 c6 8.Bg5 Bg4 9.Nbd2 Nbd7 10.Qc2 Qc7 Cualquiera diría que son Mahatma Gandhi y Martin Luther King los que disputan esta partida... 11.Rfe1 Rae8 Por variar Maróczy rompe un poco la simetría, aunque no hay diferencia sustancial entre mover una o otra torre. En la última ronda del torneo de Lake Hopatcong (1926), el húngaro prefirió 11...Rfe8 contra Capablanca. Al campeón mundial le bastaba un empate para hacerse con el trofeo así que no tuvo ningún reparo en proseguir con 12.Bh4 Bh5 13.Bg3 Bxg3 14.hxg3 Bg6 15.Rxe8+ Rxe8 16.Bxg6 hxg6 17.Re1 Rxe1+ 18.Nxe1 Ne8 19.Nd3 Nd6 20.Qb3 a6 21.Kf1 y se firmaron las tablas. 12.Bh4 Bh5 13.Bg3 Bxg3 14.hxg3 Bg6 15.Rxe8 Rxe8 16.Bxg6 hxg6 17.Re1 Esto ya es para tomárselo a chiste: de nuevo una posición simétrica sobre tablero. Bien es verdad que el negro ha ganado un tiempo... 17...a6 18.Qb1 Kf8 19.Rxe8+ Es obvio que Marco está encantado con el empate. No pasaba nada con jugar 19.Kf1 acercando el rey al centro. 19...Nxe8 20.a3 Qd8 21.Qe1 Qe7 22.Qxe7+ En este punto los contendientes acordaron tablas, pero por suerte las reglas del torneo estipulaban que había que seguir jugando al menos hasta el movimiento 30. 22...Kxe7 23.Kf1 Nd6 24.Ke2 Si echamos cuentas vemos que el negro, aparte de recuperar la desventaja del movimiento inicial, ha ganado los dos tiempos empleados en llevar el caballo de f6 a d6. No parece, ni es, gran cosa; y sin embargo estamos en la antesala de uno de los finales de partida más espléndidos de la historia del ajedrez. 24...f6 25.Ne1 b5 El negro se contenta de momento con ganar espacio, con la posible perspectiva de una ruptura en b4. 26.b4 Marco sigue empeñado en mantener la simetría. Maróczy: "Esos analistas que son capaces de oír crecer la hierba (pero a los que se les escapan sonidos más fuertes) afirmaron —tras la partida, por descontado— que este movimiento compromete irremisiblemente la posición blanca". 26...Nb6 27.f3 Nbc4 Los tiempos de ventaja acumulados por el negro dan su primer fruto: el peón de a3 está amenazado. 28.Nb1?! A partir de aquí el final comienza a decantarse, suave pero nítidamente, del lado negro. En de suponer que Marco seguía convencido de que el empate era cuestión de un par de jugadas y no prestó la debida atención. 28.Nxc4 Nxc4 29.Nd3 Nxa3 30.Nc5 era bastante simple y ahora sí son tablas clarísimas. 28...Nf5! Tocando el peón de g3. 29.g4 Nfe3 Marco despierta de la siesta para encontrarse con que el tremendo dúo de corceles negros lo deja casi en zugzwang. Su caballo de b1 no puede moverse (porque sería capturado y, luego de ...Nc4+, caería el peón de a3); el otro equino debe defender c2 para no se instale allí el segundo caballo negro y se produzca un doble ataque a a3. Si el blanco juega activamente y se olvida por un instante del peón las aguas aún podrían volver a su cauce. Pero no hay que demorarse mucho... 30.Kf2 ¿Por qué no jugar simplemente 30.g3 liberando al caballo para que pueda saltar a d3 y de allí a c5? 30...g5 31.Ke2 Marco creía que aquí 31.Nd3 se dejaba el peón, pero lo cierto es que se recupera después de 31...Nc2 32.Nc5 N2xa3 33.Nxa3 Nxa3 34.Ke2! no (34. Nxa6? Nb1) 34...Nc4 35.Nxa6 con posición igualada. Observemos, por otro lado, que 31.Kg3? no es aconsejable por 31...Nf1+ 32.Kf2 Nfd2 33.Nxd2 Nxd2 y ahora sí se gana el peón, por ejemplo 34.Nd3 Nb1 35.Nc5 Nxc3 36.Nxa6 Nb1 37.Nb8 Kd6 con ventaja negra (aunque no está claro que sea decisiva). 31...g6 32.Kf2 Kd6 Con sus movimientos precedentes el negro se ha preparado para una futura ruptura en el flanco del rey, pero para que esta tenga éxito hay que actuar primero en el lado opuesto del tablero. El objetivo es trasladar el peón de a6 hasta a4, con lo que pasará de ser una debilidad a convertirse en una molesta cuña en la posición enemiga. 32...Nd1+!? 33.Ke2 Ndb2 es un plan a considerar, procurando evitar que el blanco instale un caballo a la casilla clave d3. Sin embargo es posible jugar de todos modos 34.Nd3 Nxd3 35.Kxd3 y no está claro cómo puede progresar el negro. 33.Ke2 Kc7 34.Kf2 Kb6 35.Ke2? Marco sigue a la expectativa y queda perdido. 35.Nd3! es, aparentemente, la última oportunidad para hacer tablas. El negro puede ganar un peón en el ala de dama pero el caballo blanco pesca en el otro flanco y equilibra la balanza, por ejemplo 35...Nc2 (35...a5 conduce a una línea similar) 36.Nc5 N2xa3 37.Nxa3 Nxa3 38.Ke2! (para responder a 38...Nb1 con 39.Kd3, sosteniendo el crucial peón de c3) 38...a5 39.bxa5+ Kxa5 40.Kd3 Nc4 41.Nd7 f5 42.Nb8! (es importante hacer retroceder al monarca enemigo) 42...Kb6 43.Nd7+ Ka6 44.Nf8 fxg4 45.fxg4 Ka5 46.Nxg6, con igualdad según el ordenador. Observemos que sin la sutileza de la jugada 42 las cosas serían muy distintas, porque el rey negro estaría ahora en a4 y podría jugarse ...Kb3, seguido de ...Nb2+ y ...Na4, cayendo el peón de c3. De hecho puede probarse, aunque entenderéis que no entre en los detalles, que el blanco queda perdido. 35...a5! El negro comienza a implementar su sofisticado plan. 36.Kf2 36.bxa5+ Kxa5 seguido de 37...Ka4, gana el peón de a3. 36.Nd2!? era posiblemente un mejor intento, tratando de crear contrajuego. Después de 36...Nxd2 37.Kxd2 Nc4+ 38.Kd1 Nxa3 39.bxa5+ Kxa5 40.Nd3 las negras deberían ganar ya que su rey logra infiltrarse, pero el caballo blanco hace acto de presencia y brinda posibilidades de enredar las cosas. Una línea ilustrativa podría ser 40...Nc4 41.Ke2 Ka4 42.Nc5+ Ka3 43.Kd3 Kb2 44.Na6 Nb6 y el negro tiene la victoria al alcance de la mano. 36...a4! Primera etapa cumplida. La rana de a6 se ha convertido en un príncipe. 37.Ke2 Kc7 Ahora Maróczy traslada su rey al otro flanco, desde donde aprovechará al máximo las líneas que se abran después de f6-f5. 38.Kf2 Kd6 39.Ke2 Ke7 40.Kf2 Kf7 41.Ke2 Kg7 42.Kf2 Kh7 El rey se detiene un momento para tomar aliento. No había ningún problema en jugar directamente 42...Kh6, aunque la textual no estropea nada. 43.g3 Tarde o temprano esto es inevitable. 43.Ke2 Kh6 44.Kf2 f5! forzaría igualmente el avance del peón g, ya que si 45.Kg3 (o 45.gxf5 gxf5 46.Ke2 Kh5, y si ahora 47.Kf2 el negro responde Kh4 seguido de 48...Kg3 y g2 cae) sigue 45...Kg7! 46.Kh3 Nf1! 47.Nd3 Kf6 48.Ne1 Nb2 49.Nc2 Nd1, y ante la amenaza de mate en f2 hay que jugar finalmente 50.g3 Nfe3 51.Nxe3 Nxe3. Aquí se demuestra que el negro gana, por ejemplo 52.gxf5 (o 52.Nd2 Nd1 53.Nb1 fxg4+ 54.fxg4 Nf2+ y 55...Nxg4) 52...Kxf5! 53.Nd2 Nc2 54.Nb1 g4+ 55.fxg4+ Kg5! y los dos peones blancos de la columna g no tardarán en caer. 43...Kh6 44.Ke2 f5! Con el rey cerca de la acción llega la ruptura. 45.gxf5 Obligada ante la amenaza de ganar el peón de g4. 45...gxf5 46.Kf2 Podría considerarse 46.f4, pero después de 46...gxf4 47.gxf4 Kh5 48.Kf3 Kh4 el blanco queda en zugzwang. El intento de contraataque 49.Nd3 no sirve, ya que el peón de a4 se vuelve imparable: 49...Nc2 50.Ne5 N2xa3 51.Nxa3 Nxa3 52.Nxc6 Nc4. Ya vamos apreciando la utilidad de la maniobra a6-a5-a4. 46...Kh5 Un pasito más. 47.Ke2 f4! Nueva ruptura. Ahora no se puede evitar la penetración del rey negro. 48.gxf4 48.g4+ Kh4 49.Kf2 Kh3 es todavía peor que lo que se jugó en la partida (véase la posición tras el movimiento 51 del negro). Allí, al menos, las blancas tienen el consuelo de capturar el peón de f4. Por otra parte, si 48.Kf2 entonces 48...fxg3+ 49.Kxg3 Nf1+ 50.Kh3 Ncd2 51.Nxd2 Nxd2 52.Kg3 Nb1 53.Nc2 Nxc3 54.Kh3 Ne2 55.Kg2 Kh4. 48...gxf4 49.Kf2 Kg5! Triangulando para descolocar al otro monarca. 50.Ke2 Kh4 51.Kf2 Kh3 El blanco queda en zuzgwang. 52.Nd3 La opción 52.Ke2? Kg3 53.Kd3 Kf2, seguida de ...Kxf3, equivale a siniestro total. 52...Nc2 El peón de a3 es mucho más importante que el de f4, porque las negras consiguen un peón pasado y alejado, en tanto que el libre de las blancas se controla fácilmente. 53.Nxf4+ Kh4 54.Nd3 El caballo regresa al flanco donde está la acción. Si 54.Ng6+ seguiría 54...Kg5 55.Ne5 N2xa3 56.Nxa3 Nxa3 57.Nxc6 Nc4 que, como bien indicó Marco, es ganadora para el negro porque el peón de a4 es imparable. Por ejemplo: 58.Nd8 a3 59.Ne6+ Kf5 60.Nc5 Nd2!. La alternativa 54.Ng2+ tampoco tiene mucho sentido: 54...Kg5 55.Ke2 N2xa3 56.Nxa3 Nxa3 y el negro gana. 54...N2xa3 55.Nxa3 Nxa3 56.Nc1 Hay que ir a la defensa del peón de c3. 56...Nb1 57.Na2 Kh3 Nuevo zuzgwang. El blanco debe permitir que el negro gane espacio con su rey. 58.Ke3 Kg3 59.f4 59.Ke2!? no altera el diagnóstico, aunque exige un poco más de precisión: 59...Kf4 60.Kf2 Nd2 (el peón f cae) 61.Nc1 Nxf3 62.Nd3+ Kg4 63.Ke3 a3! (es necesario hacer retroceder el caballo) 64.Nc1 Ng5 y el negro continúa de manera similar a la partida. 59...Kg4 60.f5 No había manera de mantener la igualdad material. 60...Kxf5 61.Kd3 61.Kf3 parece lógica, ganando la oposición, pero el blanco no puede mantenerla indefinidamente: 61...Nd2+! 62.Ke3 Ne4 63.Kf3 Kg5 (la maniobra del caballo tenía como objeto impedir 64.Kg3) 64.Ke3 Kg4 y el negro avanza con su rey. 61...Kf4 62.Nc1 Kf3 63.Kc2 Na3+ 64.Kd3 Kf2 65.Kd2 Nc4+ 66.Kd1 Si 66.Kd3 Ke1 67.Kc2 Ne3+ 68.Kd3 Kd1! el rey negro también logra infiltrarse. 66...Ke3 67.Kc2 Parecería que el blanco ha creado una fortaleza, pero el negro localiza de inmediato su punto débil: 67...a3! 68.Na2 Nb2! 69.Nc1 69.Kb3 Kd2! 70.Kxa3 Kc2 gana el caballo. 69...Nd3! ¡La clave! El caballo no se puede comer: 70.Nxd3 a2 71.Kb2 Kxd3 y los peones blancos caen como moscas. 70.Nb3 Tras 70.Na2 Ke2! 71.Kb3 Kd2 72.Kxa3 Kc2 es zugzwang de nuevo. 70...Ne1+ 71.Kd1 Kd3! Nuevo sacrificio de caballo. En finales de esta naturaleza es muy típico entregar una pieza por algunos peones, que terminan siendo imparables. 72.Kxe1 Kxc3 73.Na1!? Un pequeño truco. 73...Kxd4! Lo más fácil. 73...Kb2 Es muy tentadora, ya que captura el caballo, aunque luego de 74.Kd2 Kxa1 75.Kc1 la posición parece de tablas. No es así, porque tras 75...a2 76.Kc2 el negro puede entregar su peón de c6 para conseguir otro peón pasado, y tras coronar ambos bandos se llega a un final de damas que, según la omnisciente máquina, es ganador para las negras. Dicho lo cual, sería absurdo entrar en este lío si no hay necesidad. 74.Nc2+ 74.Kd2 Kc4 75.Nc2 a2 76.Kc1 Kc3. 74...Kc3 75.Kd1 75.Nxa3 Kb2 y el caballo no tiene escapatoria. 75...a2 76.Kc1 d4 77.Na1 d3 78.Nc2 El último estertor. Si se captura el caballo son tablas por ahogado pero cualquier otra jugada gana. Maróczy lo hace bonito hasta el final. 78...c5! Y aquí Marco abandonó ante la inminente coronación de alguno de los peones negros. ¡Qué maravilla de final! 0-1 [Comentarios basados en notas de Fell]